Alina Lozano y Jim Velásquez celebraron su boda el 23 de noviembre en la Hacienda Montecano, ubicada en las afueras de Bogotá, Colombia.

Durante la ceremonia, la actriz de 54 años y el influencer de 24 intercambiaron votos expresando su deseo de no separarse.

No obstante, menos de una semana después de su matrimonio, Lozano reveló que Velásquez abandonó la casa y apenas se comunican.

En una transmisión en vivo el 29 de noviembre, Lozano compartió que su esposo no está viviendo con ella y mencionó que él se encuentra en casa de sus suegros, sugiriendo que está atravesando una crisis.

Aunque ambos acordaron que su luna de miel no sería inmediata debido a compromisos previos, Lozano expresó su preocupación por la falta de comunicación.

Señaló que, cuando intenta contactarlo, Velásquez responde de manera escueta y principalmente sobre asuntos laborales.

Lozano sugiere que la crisis podría estar relacionada con celos, mencionando que Velásquez parece incómodo con la relación laboral que ella tiene con su «community manager».

A pesar de comprender su necesidad de tiempo para sí mismo, Lozano se muestra molesta por la falta de comunicación y la actitud distante de Velásquez, describiendo su comportamiento como egoísta.

Aunque no planea buscar una reconciliación de inmediato, Lozano está abierta a hablar cuando sea el momento adecuado.

En la descripción de su video, indica que su matrimonio está en crisis y revela sentir tristeza, mientras que Velásquez aún no ha ofrecido su versión de los hechos.