Tras cinco años estudiando fuera de Miami, para Mía de Molina fue mejor tomar la decisión de independizarse, algo que no habría sido nada fácil, y es que la joven es la única hija del matrimonio de Raúl de Molina y Mily.

Pero hubo algo que la motivó a tomar esta decisión, y fue que tras años viviendo lejos de sus padres por motivos de la universidad, al regresar la hizo valorar el hecho de tener su independencia:

“Ya el segundo año, cuando me mudé sola, siento que fue un cambio muy, muy grande, de estar en casa con mis papás consentida, que me cocinaran y todo eso, pero estoy muy agradecida porque aprendí mucho y siento que puedo ser una mujer independiente. Me acostumbré mucho y también la libertad que tienes cuando vives sola de poder hacer tus cosas propias que todos los niños entienden, siento que es una transición muy grande de vivir sola y regresar con tus papás de nuevo» dijo Mía que incluso contó cómo fue que lo habló con sus padres.

“Ya no soy una niña chiquita, ya no más. Le dije ‘¿qué te parece si me mudo a un apartamento sola?’ y él ‘perfecto me parece un plan perfecto’. Conseguí un apartamento y me mudé como que al final del verano y para ser honesta, paso todos los días en Key Biscayne con ellos» contó mía a Rodner Figueroa, además de asegurar que fue totalmente respaldada por su padre.

Datos curiosos de Mía de Molina.

Por su parte, aunque su padre ha sido el que lleva una vida bajo los reflectores, a la par Mía también se ha convertido en una figura pública al ser hija de uno de los presentadores más importantes de habla hispana, y esto es lo que debes saber sobre ella: