La última entrevista de ‘El Mayo’ Zambada: Un vistazo a su intimidad
Días antes de su captura en Estados Unidos el 25 de julio de 2024, Ismael “El Mayo” Zambada, exlíder y cofundador del Cártel de Sinaloa, concedió una entrevista exclusiva a la periodista María Scherer Ibarra. Este encuentro evocó la célebre conversación que el capo tuvo en 2010 con Julio Scherer García, padre de la comunicadora.
En esta ocasión, “El Mayo” Zambada compartió detalles inéditos sobre su vida, incluyendo una faceta poco conocida: su amor por el arte y la colección de pinturas de su hijo, Vicente Zambada Niebla, alias ‘El Vicentillo’.
Un retrato que inmortalizó al capo
Cuando la periodista preguntó sobre la pintura, Zambada respondió con orgullo y sencillez:
“Ésa la pintó Vicente”.
El cuadro no estaba solo. En la guarida secreta de “El Mayo”, una pared entera estaba cubierta con las pinturas de su hijo. Retratos, paisajes y escenas variadas adornaban el espacio, cuidadosamente enmarcados y exhibidos junto con cartas que ‘El Vicentillo’ enviaba a su madre mientras estaba en prisión en Estados Unidos.
La conexión artística entre padre e hijo
Aunque Zambada García hablaba poco sobre los dibujos, su decisión de exhibirlos en su hogar dejaba entrever la profunda conexión emocional que tenía con ellos. En la recámara principal, su esposa llevó a Scherer hasta otra pintura especial: un Cristo, también realizado por ‘El Vicentillo’.
Pero la pieza más simbólica era un cuadro que representaba la famosa reunión entre Julio Scherer García y ‘El Mayo’ Zambada en 2010. En la pintura, el capo aparece con la mano en el hombro del periodista, replicando la pose original de la icónica fotografía tomada durante aquella entrevista.
Cuando María Scherer preguntó por esta obra, la respuesta de «El Mayo» fue breve:
“Me la regaló un amigo”.
“Lo extraño todos los días”: El dolor de ‘El Mayo’ por su hijo
En la conversación, Zambada García no evitó hablar de su hijo Vicente. Con una voz pausada, admitió lo mucho que lo extrañaba:
“Lo extraño todos los días”.
Cuando la periodista le señaló que miles de familias en México han vivido un dolor similar por la violencia del narcotráfico, el capo respondió con una frase corta pero reveladora:
“Conozco ese dolor”.
En su entrevista con Julio Scherer en 2010, “El Mayo” había evitado tocar el tema de su hijo, quien en ese momento ya enfrentaba sus primeros años en prisión en Estados Unidos. Según María Scherer, su padre le explicó en aquel entonces que Zambada “no quería hacer ninguna declaración que pudiera afectarle a ‘El Vicentillo’ en el juicio”.
Actualmente, Vicente Zambada vive con una nueva identidad, alejado del narcotráfico, junto a su esposa y sus dos hijos.
Así nació su amor por la pintura
En su libro El traidor: El diario secreto del hijo del Mayo, la periodista Anabel Hernández reveló cómo ‘El Vicentillo’ descubrió su talento artístico mientras cumplía su condena en una prisión estadounidense.
Aprendió a pintar de manera autodidacta, usando su tiempo en prisión para desarrollar su técnica.
También aprendió a tocar el piano y la guitarra, además de leer más de 400 libros en nueve años.
La portada del libro de Hernández incluye un autorretrato de un payaso, pintado por el propio Vicente Zambada, una alegoría de cómo se veía a sí mismo tras convertirse en testigo protegido.
En prisión, solía enviar dibujos a sus hijos y a su madre, incluyendo ilustraciones de superhéroes.
La caída de ‘El Mayo’ y el fin de una era
La captura de Ismael ‘El Mayo’ Zambada en julio de 2024 marcó el fin de una era para el Cártel de Sinaloa. Su legado criminal quedará en la historia, pero su lado más personal, reflejado en las pinturas de su hijo, muestra una faceta poco explorada de uno de los narcotraficantes más escurridizos de México.
