“Este niño que tartamudeaba y vivía en una terrible pobreza cuando era niño”: ¡Ahora es un presentador de televisión rico y un amoroso hombre de familia a los 66 años!

Nacido en Welch, Virginia Occidental, en 1957, la infancia de Steve Harvey estuvo marcada por la dificultad económica. Criado por su madre, una maestra de escuela dominical, y su padre, un minero, Steve pasó sus primeros años en Cleveland, Ohio. A pesar de las circunstancias humildes, sus padres le inculcaron una fuerte determinación y una creencia en sus sueños.

 

 

Desde joven, Steve albergaba el deseo de aparecer en televisión. Este sueño parecía lejano, dadas las dificultades económicas de su familia, pero fue lo que alimentó su ambición. A pesar de enfrentar desafíos como el tartamudeo y la falta de oportunidades, Steve se mantuvo firme en su búsqueda.

 

El camino al éxito de Steve estuvo lleno de obstáculos. Enfrentó la falta de hogar, dificultades educativas y pobreza, llegando a vivir en un coche durante tres años. A los 38 años, finalmente compró su primer coche, un hito que simbolizó su avance.

A pesar de sus dificultades, la determinación y resistencia de Steve fueron inquebrantables. Trabajó en la granja de su abuelo y su tío hasta los dieciséis años, adquiriendo valiosas lecciones de vida. Las dificultades financieras de su familia eran tan severas que no vio un inodoro con descarga hasta que tenía cinco años.

El talento cómico de Steve comenzó a brillar en 1985. Su destacada actuación en una noche de micrófono abierto lo llevó a dedicarse por completo a la comedia, a pesar de los riesgos involucrados. Su carrera despegó con apariciones en “Showtime at the Apollo” y una serie de comedia.

Hoy en día, Steve Harvey es un comediante de renombre, presentador de televisión, autor y empresario. Su viaje de la pobreza al éxito es un testimonio de su perseverancia, trabajo arduo y fe inquebrantable en sí mismo. Ha expresado su gratitud a Dios y a sus fanáticos por su apoyo a lo largo de su carrera.

La vida personal de Steve también ha sido una fuente de alegría y realización. Encontró el amor duradero con su esposa Marjorie, quien ha sido un apoyo constante y fuente de motivación. Juntos han formado una hermosa familia, que incluye siete hijos y siete nietos.

La historia de Steve Harvey es una inspiración para todos. Su viaje desde unos comienzos humildes hasta el éxito extraordinario demuestra que, con determinación, resiliencia y fe en uno mismo, todo es posible.