Goldie Hawn reveló que sufrió ansiedad y tuvo “pequeños ataques de pánico” después de conseguir su primer papel importante como actriz en Hollywood.
Durante el último episodio del podcast “Making Space with Hoda Kotb”, la actriz de 79 años recordó haber hecho una audición para la comedia “Good Morning World” en 1967, aunque creía que era demasiado joven para el papel. Sin embargo, Hawn dijo que su agente la llamó al día siguiente para decirle que los productores del programa escribieron un papel específicamente para ella.
La estrella de “Overboard” compartió que se sintió “deprimida” y “ansiosa” después de escuchar la noticia.
Ella continuó: “Llamé a casa y les dije: ‘Mami, no vas a creer esto. Sabes, escribieron un papel para mí’. Y luego me puse ansiosa y tuve pequeños ataques de pánico”.
“Me di cuenta de que cada vez que iba a un restaurante o a un lugar, me mareaba y quería irme a casa”, agregó.
Hawn recordó que mientras filmaba “Good Morning World”, hubo momentos en que tuvo que “regresar a mi camerino para recomponerme porque no sabía cuándo iba a ocurrir otro ataque de pánico”.
La actriz le dijo a Kotb que decidió buscar ayuda profesional y comenzó a ver a un psicólogo.
“Fui directamente porque no era yo”, recordó. “Quiero decir, yo era una niña feliz”.
Hawn protagonizó junto a Ronnie Schell, Joby Baker, Billy De Wolfe y Julie Parrish “Good Morning World”, que duró una temporada entre 1967 y 1968.
Después de que “Good Morning World” terminara, Hawn pasó a ser miembro regular del elenco de la exitosa serie de comedia televisiva “Rowan & Martin’s Laugh-In”, que se emitió entre 1968 y 1973. Obtuvo su primer papel importante en una película en la comedia de 1969 “Cactus Flower”, por la que ganó el premio Oscar a la mejor actriz de reparto.
Mientras hablaba con Kotb, Hawn explicó que ser proactiva con respecto a su salud mental le permitió controlar sus miedos y aprender a no verse afectada por las opiniones que otras personas tenían sobre ella.
“Cuando estaba ansiosa, asustada y temerosa, fui al médico y pasé nueve años con él”, dijo. “¿Por qué? Porque estaba aprendiendo sobre mí misma. Estaba aprendiendo a perdonar. Y estaba aprendiendo, a medida que crecía enormemente el éxito, cómo ser capaz de manejar la percepción que otras personas tenían de mí porque no me conocían”.
“Cuando alguien dice: ‘Te amo, eres genial’, eso es maravilloso. Pero no me conocen”, continuó Hawn.
“Y si la gente dice: ‘Qué asco’, ya sabes, o recibes malas críticas y todas son tan malas y terribles, piensas: ‘Bueno, esa era su percepción, pero no es la verdad’”.