PADRE TERRIBLE, ODIO A MI PADRE MÁS QUE A NADIE
La historia es bastante larga y muy complicada sobre mi familia. Solo las personas involucradas pueden entender realmente estas palabras que escribo. Los que no están en la situación podrían juzgarme superficialmente y tal vez pensar que soy una mala hija.
La razón por la que escribo esto aquí es porque rara vez hablo con amigos sobre los problemas familiares, y porque una vez perdí a un amigo cuando le conté sobre mi familia. Esa persona pensó que yo era mala por insultar al hombre que me dio la vida. También tengo novio, pero cuando le conté mi historia familiar por primera vez, se preocupó, pero después de confiarle y quejarme varias veces, dejó de interesarse. Así que ya no tengo dónde descargar esta energía negativa.
😀😀 No sería gran cosa si mi padre fuera una persona responsable, trabajadora como cualquier otra, que amara a su familia y tuviera ambición para avanzar en su carrera.
Un buen padre no necesariamente tiene que cuidar a sus hijos solo en lo material para demostrar su amor. Aunque no tuviera ni 200 mil, al menos no debería dejar que sus hijos se sintieran menos que sus amigos de la misma edad. Tal vez no pueda dar en lo material, pero un buen padre siempre apoyará emocionalmente a sus hijos. ¡Sí! Al decir esto, estoy comparando al PADRE BASURA que tengo.
Mi padre es albañil, tiene 51 años, pero su carrera no es estable. Es terco y orgulloso frente a los demás. No permite que mi madre maneje el dinero porque teme que se lo gaste todo. Toda su vida no ha podido comprar ni una moto, mucho menos una casa. Hace nueve y gasta diez, vive al día, como si estuviera esperando a que la suerte le sonriera.
El dinero que gana se lo gasta en sí mismo. No contribuye en absoluto a los gastos escolares ni domésticos. Mi madre es quien paga la electricidad, el agua, los alimentos, el internet, y él no aporta nada. Mi padre gasta al menos 200 mil al día o más, mientras que mi madre, mi hermana y yo juntas no gastamos ni 100 mil.
Aunque trabaja, siempre está endeudado porque se lo gasta todo en juegos de azar. Durante 12 años, ni siquiera compró libros ni sandalias para mi hermana y para mí. Ahora tengo 18 años y estoy estudiando en la universidad. Todos los gastos los cubre mi madre, desde la matrícula hasta la comida. Él no ha aportado ni un centavo.
Incluso le pidió prestados 700 mil a mi hermana menor, que tiene 16 años y trabaja a tiempo parcial. Pero nunca se los devolvió.
Cuando mi abuela me regaló joyas, él las empeñó para jugar. Nada en la casa es suyo: ni el refrigerador, ni los muebles, ni el televisor. ¡Ni siquiera la ropa interior que usa! Todo lo compró mi madre.
Hace 10 años, debido a sus deudas con los prestamistas por juegos de azar, intentó prenderle fuego a la casa con los cuatro miembros de la familia dentro. Mi madre tuvo que conseguir dinero para pagar sus deudas, o de lo contrario nos hubiera quemado vivos.
Mi madre ya está harta, pero no puede divorciarse porque no tendríamos un lugar donde vivir.
Cuando crecí, las discusiones con mi padre se hicieron más frecuentes. Si le decía algo, él respondía rompiendo cosas en la casa. Siempre decía que era bueno con los amigos, pero cuando estaba en problemas, nadie lo ayudaba porque nunca devolvía el dinero que pedía prestado.
Incluso hoy me amenazó con enterrarme viva y rompió cosas en casa como si él fuera el correcto.
Durante el Año Nuevo, al regresar a casa, me sentí tan deprimida. Mi madre trabaja todo el día, cocina y hace las tareas del hogar para mantener a los cuatro miembros de la familia. Mi padre gana 3 millones a la semana y, como máximo, le da a mi madre 500 mil. El resto lo guarda para apostar y beber.
Lo odio con todo mi corazón. Espero que muera pronto, o que cuando envejezca y esté débil, lo haré vivir en el infierno, en pobreza y sin apoyo.
Gracias a quienes tuvieron la paciencia de leer esto hasta el final. Estas son mis palabras sinceras.
