En medio de la polémica disputa por la custodia de José Julián Figueroa entre Maribel Guardia e Imelda Tuñón, Marcelia Figueroa, hija de Joan Sebastián y hermana de Julián Figueroa, decidió alzar su voz en defensa de la actriz Maribel Guardia, madre de su fallecido hermano, y ha revelado más detalles sobre la conducta de su cuñada en relación a su familia.

En una entrevista para el programa Ventaneando, Marcelia Figueroa ofreció un testimonio en el que aseguró haber sido testigo de los problemas de alcoholismo y drogadicción de Tuñón, los cuales, según ella, habrían afectado no solo a su cuñada, sino también a su hermano, Julián Figueroa, a quien la actriz, según Marcelia, habría alimentado en su adicción al alcohol.

Marcelia comentó que ella pudo ver en primera persona cómo Imelda Tuñón contribuía al deterioro de la salud de Julián al ofrecerle alcohol a pesar de que él estaba intentando mantenerse sobrio. “Estas conductas de ser madre y estar en la fiesta, con el alcohol, con las sustancias, exponiendo al niño, yo estando ahí veía que se iba por días y nadie sabía en dónde estaba”, afirmó Marcelia, quien también destacó la preocupación que José Julián, quien en ese entonces estaba más pequeño, sentía por la ausencia de su madre.

Además, la hija de Joan Sebastián aseguró que el comportamiento de Imelda no surgió tras la muerte de Julián Figueroa, sino que ya existían problemas familiares desde antes. Marcelia destacó que la situación empeoró con el tiempo: “Era desde que vivía Julián, pero sí se incrementó, y me atrevo a decir que creo que mi hermano le estorbaba… Julián tenía que ir a rescatarla muchas veces porque amigos le hablaban y le decían, pese a lo difícil que era para él porque también tenía un problema”.

Marcelia también relató cómo, en varias ocasiones, presenció a Imelda y a su madre tomando alcohol en la casa de Julián, mientras él intentaba mantenerse alejado de las sustancias: “Me tocó verlo cuando Julián todavía vivía, me tocó ver tanto a la mamá, como a Imelda, en casa de Julián poniéndose la fiesta enfrente de mi hermano”, comentó.

De igual modo, la hermana de Julián Figueroa señaló que, a pesar de los esfuerzos de la familia para mantener a Julián alejado del alcohol debido a su rehabilitación, Imelda Tuñón no parecía respetar esa lucha. “Cuando salía de rehabilitación, ella iba y le ponía la botella, era lo primero que le hacía, para él era un conflicto horrible”, recordó Marcelia, dejando claro que este comportamiento de Imelda agravó aún más la situación de su hermano.

Marcelia también mencionó que José Julián, el hijo de Imelda y Julián, comenzó a darse cuenta de los problemas que su madre enfrentaba. “Él decía ‘mi mamá nunca está’ o ‘está en la fiesta’, un niño tal vez no sabe que su mamá está alcoholizada, pero sabe que está rara”, afirmó. La hija de Joan Sebastián también elogió a la sobrina de Maribel Guardia, quien, según ella, ha tomado un papel muy importante en la vida de José Julián, acompañándolo en sus actividades y brindándole el cuidado que necesita, aunque recordó que “no es lo mismo que tener a la mamá”.

Marcelia Figueroa también dejó claro que José Julián está bien en casa de Maribel Guardia, donde se encuentra en un entorno familiar más estable y está acostumbrado a la presencia de su abuela, la actriz, quien siempre ha estado involucrada en su vida. “José Julián está bien, está acostumbrado a estar con Maribel, sin que su mamá estuviera presente en sus actividades diarias”, afirmó.

Finalmente, Marcelia Figueroa reveló que su relación con Imelda Tuñón terminó tras la muerte de su hermano, Julián Figueroa, debido a que fue la propia Imelda quien dejó de hablarle, lo que dejó la relación familiar en un punto irreversible.

Esta disputa por la custodia de José Julián continúa atrayendo la atención de los medios y el público, y las declaraciones de Marcelia Figueroa siguen sumando detalles a la compleja situación familiar que rodea a la familia Figueroa-Guardia.