La tranquilidad de la tarde del lunes 20 de enero se desvaneció rápidamente en la colonia Villa Bonita, al sur de Culiacán, Sinaloa. A las 7:00 p.m., el sonido de las detonaciones rompió la calma, sembrando miedo y confusión entre los residentes. Videos que circulan en redes sociales muestran a familias resguardándose en locales de tacos mientras el estruendo de las balas sacudía el ambiente.
¿Qué sucedió?
Los hechos ocurrieron en un contexto de alta tensión por la actividad de grupos criminales en la región. Según reportes preliminares, un enfrentamiento armado entre células del crimen organizado habría desatado la balacera. Las ráfagas no solo dejaron un vehículo completamente incendiado, sino también daños en fachadas de viviendas y automóviles.
Carlos Omar “N”, de 25 años, fue trasladado a un hospital en un vehículo particular tras resultar herido. A pesar de los operativos conjuntos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Policía Estatal, no se han reportado detenciones.
El impacto de la violencia en los habitantes
Vecinos relatan momentos de angustia. “Estábamos cenando cuando comenzaron los disparos. Mi hija empezó a llorar, y solo pensamos en escondernos”, cuenta Juan, residente de la zona. Este testimonio refleja el miedo latente en una ciudad que en los últimos años ha sido escenario de múltiples episodios violentos.
Ataques recientes en Sinaloa: un patrón preocupante
Este incidente no es un hecho aislado. Apenas el pasado 18 de enero, agentes de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) repelieron un ataque en San Francisquito, Mazatlán. En ese operativo fueron asegurados 20 vehículos, dos con blindaje, armas largas y tres sospechosos detenidos.
La coincidencia en las fechas y la cercanía geográfica levantan preguntas sobre la posible relación entre ambos eventos. Analistas señalan que estas acciones pueden estar ligadas a ajustes de cuentas o disputas por territorio entre grupos criminales.
Reacción de las autoridades
Aunque elementos de seguridad implementaron operativos para controlar la situación en Villa Bonita, la falta de detenciones resalta la complejidad del panorama de seguridad en Sinaloa. Fuentes locales indican que algunas personas podrían haber sido privadas de su libertad durante los eventos, un dato que refuerza la gravedad de la situación.
